"Lleno de fantasmas", es el cementerio más grande y que más miedo mete

El cementerio más grande del mundo está repleto de fantasmas. ¿Hay vida después de la muerte? Una de las dudas existenciales más recurrentes. Ante estos casos acá en el norte se dice que existen "almas en pena". Pero en este caso se trata del cementerio más grande de todos.

Un cementerio es un lugar donde se depositan los restos de las personas que, físicamente, nos dejaron para siempre en este mundo. Sin eufemismos, gente que falleció. Según la cultura, los cuerpos se pueden velar, efectuar ritos o mantenerlos encerrados por días en una morgue.

Hasta que llega el momento del destino final de ese cuerpo inerte: en unos casos pueden introducirse en ataúdes, féretros o sarcófagos, para luego enterrarlos bajo tierra o depositarlos en nichos, mausoleos u otro tipo de sepulturas.

Sin embargo, el espíritu fantasmal de esa persona que ya no vive es otra cosa. Y muchas partes del mundo también son (o pueden ser) el centro de encuentros fantasmales, que generan terror, miedo, aunque también pueden llegar a ser los Djinns (o genios), que abundan en todo el mundo musulmán. Algo de todo esto está ocurriendo desde hace tiempo en Irak, donde los episodios paranormales se vienen repitiendo con una frecuencia inusitada, que asusta a quienes merodean el sitio.

Aunque los cementerios debieran ser sitios que transmiten serenidad, algo de paz, porque allí se sitúan los seres más queridos, muchas veces se convierten en espacios embrujados, enigmáticos.

Esa tendencia se produce debido a que ahí, desde tiempos inmemoriales, se roban tumbas, violando el descanso final de los difuntos, o simplemente porque no les cumplieron los pedidos a esos muertos, que de esa manera no consiguen la elevación.

La entrada al cementerio, donde venden ofrendas, talismanes y lápidas.

La descripción tiene un agravante: en todo cementerio reinan la oscuridad y las sombras, por lo que se convierten en un escenario perfecto para que se activen todo tipo de entidades sobrenaturales.

Y si bien en el planeta existe innumerable cantidad de antecedentes, el más grande se encuentra 150 kilómetros al sur de Bagdad. Se trata del cementerio islámico Wadi us-Salaam, cuya traducción es, justamente, Valle de la Paz, cubre el 13% de la tierra total en la ciudad sagrada chiita de Nayaf. Está en la Lista Tentativa de Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Unesco debido a que es el cementerio más grande del mundo y el único que tiene una actividad ininterrumpida de más de 1.400 años.

Pero lo más sorprendente no es su magnitud sino su historial, considerando que los enterradores son repetidamente atacados por apariciones fantasmales, detalla Contexto.