Murió la niñera de Lautaro Martínez: La fortuna que tiene pagarle a la familia

En la previa de la doble fecha de las Eliminatorias Sudamericanas, el futbolista argentino Lautaro Martínez se encuentra en el centro de una controversia legal. El Tribunal de Milán lo ha condenado a pagar una indemnización a la familia de una mujer que trabajaba como niñera en su hogar y que lamentablemente falleció a causa de una grave enfermedad poco después de ser despedida.

Esta situación ha generado un revuelo en el mundo del fútbol, ya que Lautaro Martínez se ha destacado por mantener un perfil bajo a lo largo de su carrera y no ha estado involucrado en controversias públicas.

El incidente se remonta a septiembre de 2021, cuando el futbolista contrató a la joven para cuidar a sus hijos. Sin embargo, debido a una enfermedad grave, la niñera tuvo que abandonar su empleo en mayo de 2022. A pesar de la delicada situación de salud de la empleada, fue despedida en julio del mismo año y lamentablemente falleció a los 27 años.

Daniele Mari, periodista italiano, ha proporcionado detalles sobre la indemnización que Lautaro Martínez deberá pagar a la familia de su exempleada. Según Mari, la indemnización asciende al equivalente de al menos 15 meses del salario que la niñera habría recibido al final de su empleo, además de los gastos legales.

El tribunal determinó que el período de aviso debería haber sido de 67,5 días en lugar de los 49 días establecidos por el futbolista, por lo que la sentencia ordena el pago de la remuneración que le habría correspondido a la empleada hasta la fecha en que se completó el proceso legal.

Milagros Lizzola, la niñera en cuestión, era originaria de Mendoza y había forjado una estrecha amistad con Agustina Gandolfo, la pareja de Lautaro Martínez, quien también es de esa provincia. Milagros había trabajado para el futbolista y su pareja, ayudando en el cuidado de su hija Nina. Sin embargo, una grave enfermedad interrumpió su empleo y, lamentablemente, falleció a principios de este año.

Este veredicto legal ha suscitado un debate sobre la responsabilidad de los empleadores en situaciones similares y ha llevado a reflexionar sobre las condiciones laborales y la atención a la salud de los empleados en el ámbito doméstico.