Se retira uno de los proteccionistas más queridos del norte argentino

Mientras en las redes sociales de Jujuy se comparten fotos de animales rescatados en San Pedro o Lozano, una noticia corrió como reguero de pólvora por el norte argentino: una de las voces más fervientes y queridas en la defensa de los animales, Abdul Onur, debe tomar distancia.

El anuncio no es una simple noticia de otra provincia; es sentir que un aliado estratégico en una causa que no conoce de fronteras se retira, temporalmente, de la primera línea.

En un emotivo mensaje que rápidamente traspasó los límites de Salta, Onur, quien se define como un "servidor" de los callejeros, fue claro y directo sobre la difícil situación que lo obliga a frenar. Sus palabras, crudas y sinceras, reflejan un desgaste que muchos proteccionistas anónimos de Jujuy conocen demasiado bien: el de enfrentar a diario la indiferencia y la crueldad. "Amigos, lamentablemente tengo que despedirme por un tiempo. La situación se puso difícil y no puedo seguir con mi labor de ayudar a los animales de la calle", escribió.

El activista no solo apuntó a su estado físico, sino que puso el foco en el peso emocional insostenible que acarrea esta tarea. "...por eso necesito un descanso de tanta crueldad que uno ve x las redes y en la calle misma. por mi salud debo frenar un poco mi labor", detalló en su publicación. Esta confesión resuena profundamente en lugares como San Salvador de Jujuy, donde voluntarios de agrupaciones como "Patitas Jujeñas" o "Huellitas del Alma" batallan cada día con las mismas imágenes y la misma frustración, intentando generar una conciencia que aún cuesta instalar.

A pesar del golpe, Onur dejó en claro que su lucha, y los logros alcanzados, son un patrimonio colectivo. No se atribuyó méritos personales, sino que los enmarcó en el apoyo de la gente. Entre los hitos que destacó, hay dos que resuenan como un anhelo también para muchos en Jujuy: "...pudimos abrir un hospital público para los angelitos" y "...pudimos erradicar la tracción a sangre y que sea ley la pirotecnia cero". Logros que, desde el otro lado de la Ruta 9, se miran con esperanza, preguntándose cuándo llegará el día de ver avances similares en la provincia.

Antes de despedirse, su llamado fue a la unidad y a continuar con la misión: "Oren por mi y sigan mi legado. Gracias totales perdón. Y Amén". Y concluyó con un pedido que es bandera en todos los grupos de proteccionistas jujeños: "Les pido que cuiden a sus mascotas y, si pueden, ayuden a los que lo necesitan".