Encontraron a la bebé más buscada después de más de 50 años

Una conmovedora historia de búsqueda emocionó a todos tras uno de los casos de desaparición infantil más largos de Estados Unidos. La familia Highsmith logró reencontrarse con Melissa, quien había sido secuestrada en 1971 cuando tenía apenas 22 meses, luego de más de medio siglo de incertidumbre, dolor y una investigación que parecía no tener fin.

Todo comenzó el 23 de agosto de 1971, cuando Alta Apantenco, recién separada y trabajando largas horas como moza, contrató a una niñera a través de un aviso del diario local en Fort Worth, Texas. La mujer aceptó el trabajo sin una entrevista previa, pasó a buscar a la pequeña Melissa... y nunca más la devolvió. A partir de ese instante, la familia inició una búsqueda desesperada que se extendería durante 51 años.

Durante los primeros días, la principal sospechosa fue la propia madre, acusada falsamente de haber matado a su hija. Sin embargo, Apantenco insistió en su inocencia y colaboró en cada instancia de la investigación. La policía recorrió toda la zona, pero el paso del tiempo debilitó el caso. Lejos de rendirse, los Highsmith continuaron investigando por su cuenta, creando incluso una página de Facebook llamada "Buscando a Melissa" y realizando numerosas pruebas de ADN.

La clave llegó en noviembre de 2022, cuando una genealogista recomendó un nuevo camino. Pese al cansancio emocional tras décadas de resultados negativos, la familia decidió usar el servicio de genealogía 23andMe. Gracias a una coincidencia genética con los hijos de Melissa, pudieron rastrearla y confirmar su identidad.

La noticia impactó a todo Estados Unidos: Melissa había vivido la mayor parte de su vida a pocos minutos de la casa de sus padres, bajo el nombre de Melanie Brown, sin saber jamás que había sido secuestrada.

"Estoy agradecida de que aceptara enviar su ADN... Es por eso, y por la presentación de mi padre, que pudimos encontrarla. En tres semanas encontramos a mi hermana. Fue como ‘Boom, boom, boom'", contó Victoria Highsmith, una de las hermanas. También relató el calvario de su madre: "Ella cargó con este dolor y esta culpa durante 51 años. Nunca la había visto llorar de alegría hasta que recuperamos a Melissa".

Según Melissa, la revelación la tomó completamente por sorpresa. "Mi padre me envió un mensaje en Messenger y me dijo: ‘He estado buscando a mi hija durante 51 años'", recordó. Al principio dudó, hasta que mencionaron una marca de nacimiento en su espalda y vio una foto suya de bebé: no había dudas, era ella.

La familia compartió que Melissa vivió en Texas toda su vida, sin saber su verdadera historia, y que tampoco tuvo una infancia sencilla: a los 15 años se escapó de la casa donde creía haber crecido. "Pensaba que no tenía mucha familia, y descubrió que tiene una enorme que la ama y nunca dejó de buscarla", expresaron sus hermanas.

El reencuentro no solo trajo alivio y paz, sino también justicia emocional para su madre. "Durante 50 años mi mamá vivió con la culpa de haber perdido a Melissa, y con acusaciones terribles. Estoy muy contenta de que tengamos de nuevo a mi hermana. Y agradecida de que, finalmente, se haya reivindicado a mi mamá", cerró la familia.