Terrible

Así destaparon estafa millonaria de una fiesta de egresados en Misiones

Una madre quedó en el centro de una grave denuncia tras la desaparición de 17 millones de pesos.

QPJ SOCIEDAD

Lo que debía ser una celebración inolvidable terminó convertido en una carrera contrarreloj y en una causa judicial en Eldorado, Misiones. A pocas horas de la fiesta de egresados de la Escuela Provincial de Comercio N°19, un grupo de padres descubrió que el dinero reunido durante meses para el evento no estaba disponible y que varios de los servicios contratados nunca habían sido abonados.

La situación salió a la luz el mismo día de la fiesta, cuando los responsables del salón, la decoración y otros proveedores confirmaron que no habían recibido pagos. La sorpresa inicial dio paso al desconcierto y, luego, a la indignación. Según relataron las familias, la recaudación total rondaba los 17 millones de pesos, producto de aportes mensuales realizados por unas 35 familias a lo largo de ocho meses.

La administración del fondo estaba a cargo de una madre del curso, Romina Enríquez, quien también tenía a una hija entre las egresadas, según informó TN. De acuerdo con lo denunciado, el dinero le era transferido o entregado en efectivo, mientras ella aseguraba que la organización avanzaba con normalidad. Sin embargo, el mismo día del evento comenzaron a circular mensajes en los que la mujer admitía haber utilizado la plata para apuestas, mencionando problemas de ludopatía y afirmando que había intentado "recuperar" lo perdido.

Tras esos mensajes, el contacto se cortó. Enríquez dejó de responder en los grupos de WhatsApp y no volvió a presentarse ante las familias, lo que incrementó las sospechas y derivó en una denuncia penal que ya está siendo investigada por la Justicia misionera. Algunos padres, incluso, pusieron en duda que el destino del dinero haya sido únicamente el juego, aunque el reconocimiento de esa adicción forma parte del expediente.

Pese al golpe económico y emocional, las familias resolvieron no cancelar la fiesta. Con aportes de último momento, gastos extra y la colaboración de todos, lograron que los chicos tuvieran su celebración. Muchos llevaron comida desde sus casas y los servicios se cubrieron sobre la hora.

Uno de los momentos más sensibles fue el de la hija de la mujer denunciada, quien también participó del evento. Según contaron los padres, la adolescente fue acompañada y contenida por sus compañeros, que entendieron que no tenía responsabilidad en lo ocurrido y priorizaron cerrar juntos una etapa escolar marcada por la solidaridad en medio del conflicto.

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