Le quitó el celular al chorro que le robó y se vengó de la peor manera

A las 8 de la mañana, un pibe salió rumbo al trabajo y se cruzó con un chorro que le arrebató el celular. Según relató, lo persiguió a toda velocidad: "Corrí al chorro, lo corrí, le llegué a pegar un arrebato y cuando yo le pego un arrebato en la cara se le cae su celular".
El ladrón igual logró escapar en moto... pero dejó su propio teléfono tirado.

El joven, ya camino al laburo, descubrió que podía desbloquearlo sin problemas: la contraseña era "1 2 3 4". Con el aparato en la mano, intentó comunicarse con la familia del chorro: "Empiezo a mandar mensaje a la mujer, a la madre, a los grupos familiares... y ninguno me dio bola. Me bloquearon".

La decisión que cambió todo

Sin respuesta y sin recuperar lo suyo, optó por una estrategia poco común: subir a las redes del ladrón todas las fotos íntimas que encontró en la galería. "Eran fotos en el telo con la germu, fotos en culo, de él, en voz", detalló.

Minutos después, el chorro explotó. Lo llamó desde otro número para exigirle que borrara todo:
- "Flaco, no me podés... No me podés escrachar así. No ves que tengo familia".

El joven, indignado, le respondió entre gritos desde su trabajo. Y ahí apareció el giro inesperado: el ladrón viajó desde Barracas hasta Ciudad de La Banda solo para devolverle su celular.

El chat que lo dejó expuesto

Antes de entregar el móvil ajeno, el joven abrió WhatsApp Web desde la compu de un compañero. Más tarde revisó las conversaciones y encontró un mensaje contundente de la pareja del chorro:
- "No cambiás más, volviste a robar".

Según contó, no era la primera vez: en la agenda había contactos escritos con códigos carcelarios y todo indicaba un pasado pesado.