Filmaron a empleados robando y los dueños perdieron el juicio: "Nos dio ganas de..."
El referente del grupo Los Lazos contó un caso que lo dejó al borde de bajar la persiana tras un fallo adverso. Su relato encendió al sector y volvió a poner en agenda el debate sobre el sistema laboral.
En pleno congreso de Agroeducación, realizado en la Bolsa de Comercio de Rosario, el titular del grupo agroindustrial Los Lazos encendió la sala con una frase que dejó mudos a varios.
"Hoy todas las empresas pierden todos los juicios laborales habidos y por haber", lanzó ante un auditorio de más de 400 personas.
Para respaldar su postura, relató un caso que generó debate inmediato entre los presentes: tres empleados fueron descubiertos robando, quedaron filmados y hasta firmaron una confesión ante un escribano. Aun así -según su relato- la empresa terminó condenada.
"Nosotros agarramos tres empleados robando, los filmamos, y confesaron ante escribano público, pero terminamos pagando porque la Justicia nos falló en contra. En primera instancia lo ganamos, pero en segunda instancia lo perdimos. A mí me dio ganas de cerrar toda la empresa. Nosotros tenemos 800 empleados, pero me dio ganas de irme. Así que si no cambia el tema laboral, va a ser imposible trabajar en la Argentina", dijo.
El golpe fue tan fuerte que, asegura, llegó a plantearse abandonar la actividad.
Reclamo directo a la Justicia y al Gobierno
Boglione pidió una reforma profunda del sistema laboral para evitar fallos que -según él- desalientan la inversión.
"Tiene que haber un cambio desde la Justicia. Si el gobierno no toca a fondo ese tema, no sé si va a haber mucho futuro. Es cierto que es una patriada muy grande, porque van a tener todos los sindicatos y todo en contra", remarcó.
Para provincias productivas como Salta, donde la industria agroalimentaria pelea por reducir costos y sostener empleos, un escenario judicial imprevisible golpea de lleno la competitividad.
La otra traba: la informalidad en la industria láctea
El empresario también apuntó contra la evasión dentro del sector lácteo, donde su grupo integra tambo y usina. Según dijo, enfrentan un nivel de informalidad que distorsiona precios y margina al que cumple.
"El peor competidor que tenemos nosotros es la informalidad. En la lechería se habla de un 45% de informalidad. Entonces, cuando el gobierno promete bajar impuestos, yo quiero que los bajen, pero primero que les cobren a todos. Ampliemos la cantidad de gente que paga y automáticamente los impuestos van a bajar. Porque vamos a pagar entre todos. Si siempre van a cazar al zoológico, no hay salida".
Contó incluso que, tras críticas de su padre, sufrieron inspecciones integrales de Afip, mientras otros siguen operando "como si nada":
"Una vez, cuando mi papá era presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario criticó al ministro de Economía, Roberto Lavagna, y nos cayó una inspección integral de Afip. Hace 2 o 3 años nos cayó otra integral, pero en paralelo hay 45% de informalidad que sigue operando como si nada".
Inversiones y energía: Los Lazos proyecta su propio parque eólico
A pesar del diagnóstico crítico, Boglione confirmó que analizan la construcción de un parque eólico en Balcarce, con entre 30 y 32 molinos. La idea es asegurar energía propia, bajar costos y cumplir con las exigencias ambientales que plantean clientes como Roemmers y Danone.
"Es para generación propia pensando no solo en mejorar costos y garantizar abastecimiento, sino también en nuestros clientes, como Roemmers y Danone, que avizoran más exigencias en disminución de huella de carbono".
En La Sibila, la planta láctea del grupo, producen leches en polvo y elaboran a fazón fórmulas infantiles para marcas líderes.
"Hoy no pagan un plus por las inversiones verdes, pero es fundamental agregar valor y, como proveedores, para estar preparados para las nuevas exigencias ambientales, tanto en el mercado externo como en el interno".
Esta nota habla de:


Comentarios