Demarco intentó defenderse de la impugnación: "La inhabilitación es municipal"

No hace mucho, el Concejo Deliberante de Perico tuvo en su seno un Juicio Político histórico contra el intendente, Luciano Demarco, que pasó de ver el mundial de Qatar en persona a una destitución con inhabilitación para ejercer cargos públicos, por 10 años. Los ediles, aplicaron la dura sanción sobre Demarco por la usurpación de una plaza y la entrega irregular de un terreno, propiedad del municipio, a un privado.

El derrotero del ex intendente lo llevó al prematuro sueño de ser gobernador de Jujuy y para esto, consolidó una alianza entre su partido VIA y libertarios, rechazados en más de una oportunidad por Javier Milei, líder indiscutido de La Libertad Avanza.

Con una pomposa cena, cuya entrada tenía un costo de 5 mil pesos, juntaron plata para la campaña y se tiraron del trampolín alto para disputar, nada menos, que el máximo cargo del Ejecutivo Provincial que deja Gerardo Morales.

Por supuesto, las malas noticias no dejarían de llegar al frente VIA - Libertarios. Una impugnación presentada por los apoderados del Frente Cambia Jujuy deja a Demarco con un pie afuera. Entre los fundamentos de dicha presentación, toma relevancia la resolución del Concejo Deliberante que lo inhabilita para ejercer cargos públicos, entendiendo que esta debe corresponder a todo cargo en todo el territorio provincial.

Demarco intentó defenderse y además de buscar supuestos poderes oscuros que buscan proscribirlo e impedirle alcanzar el mando gubernativo. "Entendemos que la misma tiene alcance municipal: el Concejo Deliberante no puede tomar medidas con mayor alcance que ese", sostuvo el intendente destituido buscando minimizar los efectos de la resolución del cuerpo deliberativo de la ciudad tabacalera.

"Hay más hostilidad. Cuando uno habla y levanta la voz no se abren espacios de diálogo sino (que) es cortar cabezas, aniquilar al que piensa diferente", agregó.

Otra vez, Demarco se sujeta al papel de víctima, que como ya lo dijo alguna vez, fueron perseguidos por ser "blancos y chetos".