Se vine una fiesta única en el mundo: Casabindo está de fiesta

El pueblo de Casabindo, en la Puna de Jujuy, se convierte cada 15 de agosto en el epicentro de una tradición ancestral que desafía el paso del tiempo. La Fiesta de la Asunción de la Virgen y del Toreo de la Vincha, única en su tipo en América, fusiona la devoción católica con un rito precolombino. En este evento, la valentía y la fe se entrelazan en un espectáculo que conmueve a todos los presentes.

El Toreo de la Vincha no es un espectáculo taurino común. Aquí no hay muerte, solo un ritual de ofrenda y respeto. Los valientes "toreros" se enfrentan al toro no para matarlo, sino para arrebatarle una vincha adornada con billetes y monedas que lleva en sus cuernos. Este acto, que requiere agilidad y destreza, es un gesto de ofrenda a la Virgen de la Asunción. El toro, liberado después del rito, se convierte en un símbolo de la fuerza y la fertilidad de la tierra.

La emoción se respira en el aire. Los colores vibrantes de las vestimentas tradicionales, el sonido de los sikus y erkes, y la fe inquebrantable de los peregrinos crean un ambiente mágico. Es un momento en el que la historia, la cultura y la espiritualidad de la región se manifiestan con una fuerza arrolladora. Casabindo no solo celebra una fiesta, sino que reafirma su identidad y su vínculo profundo con la tierra y las tradiciones ancestrales. Es un espectáculo que nos recuerda la riqueza cultural de nuestro país y la capacidad del ser humano para mantener vivas sus raíces más profundas.