Polémica

Insólito: comunidades indígenas reclaman por la falta de agua en una zona donde no se produce litio

Los datos oficiales contradicen sus reclamos

QPJ JUJUY

La Primera Cumbre Intercultural Andina generó controversia con afirmaciones cuestionables sobre la industria del litio en Jujuy. Mientras las comunidades de Salinas Grandes y Laguna de Guayatayoc denuncian el impacto ambiental de esta actividad, los datos oficiales contradicen sus reclamos.

El agua: un reclamo infundado

Uno de los ejes centrales de la cumbre fue la supuesta afectación de los recursos hídricos debido a la extracción de litio. Sin embargo, en Salinas Grandes y Laguna de Guayatayoc no hay producción de litio, sino solo actividades exploratorias que requieren cantidades mínimas de agua.

Según la Ley General de Medio Ambiente de Jujuy, los proyectos de exploración de litio deben cumplir con estrictos límites en el uso del agua. El artículo 23 establece que "no es necesario el uso de agua o su uso será solo para trabajos que se realicen, no permitiéndose ensayos de bombeo ni tomas de muestras de agua de volúmenes superiores a los cincuenta litros por unidad".

La verdadera explotación de litio en Jujuy se encuentra en la Cuenca Olaroz-Cauchari, donde operan Sales de Jujuy y Minera Exar, con una producción conjunta que supera las 25.000 toneladas anuales. En esta zona, las comunidades de Susques, Olaroz Chico, Huáncar, Puesto Sey, Catua, El Toro y Pastos Chicos han validado la actividad y no han presentado denuncias sobre el uso del agua.

Controles ambientales y fiscalización estatal

Otro de los reclamos vertidos en la cumbre fue la supuesta falta de control estatal sobre la industria del litio. No obstante, los proyectos mineros en Jujuy están sometidos a fiscalizaciones constantes por parte de organismos oficiales, incluyendo la Secretaría de Minería e Hidrocarburos, el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático y la Dirección de Recursos Hídricos, entre otros.

Las auditorías incluyen controles programados cada trimestre y fiscalizaciones espontáneas en cualquier momento. Esto garantiza el cumplimiento de los protocolos ambientales y la transparencia en el impacto ecológico de la actividad minera.

La posición de las comunidades

Si bien algunas comunidades se oponen a la exploración y explotación de litio, otras han manifestado su respaldo a estos proyectos. En la Laguna de Guayatayoc, la comunidad de Quera y Agua Caliente apoyó en 2022 las tareas exploratorias de Pluspetrol, mientras que Sausalito acompaña los trabajos de la misma empresa. En Rinconadillas, Tecpetrol ha recibido respaldo para comenzar exploraciones en 2024.

Lipán, por su parte, respalda a Lition Energy y ha defendido su autonomía mediante comunicados públicos en los que exige respeto por su derecho a decidir sobre su territorio.

En la Cuenca Olaroz-Cauchari, las comunidades de Susques, Olaroz Chico, Huáncar, Puesto Sey, Catua, El Toro, Pastos Chicos, Paso de Jama, Coranzulí y San Juan de Quillaques han apoyado los proyectos de Minera Exar y Sales de Jujuy, actualmente controlada por Río Tinto.

Un debate abierto

El litio representa una oportunidad económica clave para Jujuy y el país, pero también genera tensiones entre el desarrollo industrial y las preocupaciones ambientales. La discusión sobre su impacto debe basarse en datos concretos y en un diálogo realista entre comunidades, gobierno y empresas./LITIO ARGENTINA

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