Es el intendente pero brilla por su ausencia: otra más de Rivarola en Palpalá

En el barrio 18 de Noviembre de Palpalá, los vecinos celebraron un nuevo aniversario con un acto organizado por el Centro Vecinal, pero una vez más la ausencia del intendente Rubén Eduardo Rivarola generó malestar y preocupación. Gladis Torres, presidenta del Centro Vecinal, expresó públicamente su descontento y aseguró que esta situación se repite año tras año. "Hace tres años que estamos en el Centro Vecinal y nunca vino, tampoco nos da una audiencia", lamentó.

En los comentarios a nuestra transmisión, la gente manifestó su indignación:

"Solo aparece cuando necesita votos; no le importa nada Palpalá", son algunos de los más resonantes.

Torres explicó que el aniversario del barrio no es una fecha menor, sino un momento importante para la comunidad, que se reúne para reflexionar sobre sus necesidades y proyectar mejoras. Sin embargo, afirmó que la falta de acompañamiento por parte del jefe comunal se volvió una constante. "Lamentablemente ya es una costumbre que el intendente no esté, brilla por su ausencia", señaló.

Durante la jornada, los vecinos destacaron el esfuerzo de la comunidad para mantener el barrio activo, pese a las carencias que aún persisten en infraestructura, servicios y mantenimiento. Para la presidenta del Centro Vecinal, la presencia del intendente hubiese sido un gesto significativo. "Esta no es una fecha más, hubiese estado lindo que esté presente", expresó.

Torres también remarcó que el Centro Vecinal lleva años solicitando una audiencia formal con el Ejecutivo municipal para plantear las problemáticas del barrio, pero aún no obtuvieron respuesta. Asegura que lo único que reclaman es ser escuchados y trabajar en conjunto para mejorar la calidad de vida de los vecinos.

Mientras tanto, la comunidad del 18 de Noviembre continúa organizándose por su cuenta, con el deseo de que las autoridades municipales se acerquen y establezcan un diálogo real. Para los vecinos, la presencia institucional en estos actos no es un simple formalismo, sino un reconocimiento al trabajo barrial y a las necesidades que esperan ser atendidas.