Buscan voluntarios para entregar comida el 24 de diciembre a la noche en la calle

En un contexto de crisis económica donde "no hay un peso en la calle", el comedor Bajo el Árbol vuelve a demostrar que la solidaridad no se suspende ni en los peores momentos. Fieles al dicho "en las buenas y en las malas", sus integrantes organizarán una Cena de Nochebuena para acompañar a quienes realmente no tienen nada. La gente ya fue censada y cada familia recibirá una vianda completa para que pueda sentarse a la mesa el 24 con un plato digno y un gesto de cariño en una fecha tan especial.

Las zonas más golpeadas por la necesidad -2 de Abril, Las Tipas, Antártida y Florida- forman parte del recorrido que año tras año realiza este grupo solidario, que ya conoce de cerca las realidades más duras. Para esta Nochebuena, el objetivo es entregar cerca de 200 bandejas con una cena completa, pan dulce y todo lo que se pueda sumar para aliviar, aunque sea por una noche, la situación de las familias más vulnerables. El mentor de esta iniciativa recuerda que una vez llegó a una vivienda y, en plena Navidad, la familia estaba preparando anchi porque no tenían otra cosa. Desde entonces, el comedor decidió que en cada 24 de diciembre habría al menos un plato especial para quienes más lo necesitan.

La tarea no es sencilla: implica movilizar donaciones, organizar la cocina, recorrer los barrios y entregar cada vianda personalmente. Una persona dona los pollos, docentes y escuelas aportan mercadería y vecinos de distintos puntos colaboran como pueden. Aun así, el espíritu del comedor es claro: nadie debería pasar la Navidad sin algo para compartir. Por eso también se buscan voluntarios para acompañar la entrega. La jornada suele extenderse hasta las dos o tres de la madrugada, pero los organizadores aseguran que el cansancio pasa a segundo plano cuando se trata de hacer algo por el otro.

Quienes deseen sumarse con mercadería, recursos o simplemente un par de manos para ayudar pueden comunicarse al 3886047955. En un año difícil, esta iniciativa recuerda que la empatía sigue viva y que la Navidad puede ser un puente de unión y alivio, especialmente para quienes más lo necesitan.