Teléfono Bukele

EXCLUSIVO: así es una "celda VIP" en la cárcel. Hay mucha indignación

En contexto de encierro pero con celular, plata y muchos privilegios. Subió todo a las redes sociales

QPJ Policiales

Abel Lobo, de 27 años, conocido por ser uno de los miembros de la banda delictiva "Los Gardelitos", ha generado controversia al publicar en su cuenta de Instagram una imagen de su celda en la cárcel de Villa Urquiza. La publicación deja entrever la posibilidad de que haya recibido privilegios en su reclusión, generando dudas sobre el sistema penitenciario.

"Bukele vení un tiempito a Argentina", comentó uno de los usuarios de las redes sociales, ironizando porque se nota la impunidad de algunos presos VIP.

Lobo, quien estuvo prófugo durante cuatro meses, fue detenido en un operativo en un departamento de Córdoba por las autoridades, lideradas por el fiscal Diego López Ávila. Hijo de Walter David "Petiso" Lobo, también vinculado a actividades ilegales y conocido por exhibirse en redes sociales, Abel Lobo no ha escapado a la atención pública ni siquiera tras las rejas.

La versión de que Lobo podría haber obtenido un trato preferencial en la cárcel de Villa Urquiza cobró fuerza después de que circularan rumores sobre posibles pagos de dinero por parte de sus allegados para asegurar su comodidad tras las rejas. Estos rumores llevaron a las autoridades a tomar medidas rápidas para su traslado, aunque aparentemente no lograron evitar la situación que él mismo exhibió en su red social.

Los antecedentes delictivos de "Los Gardelitos" son preocupantes. Desde violentos asaltos a particulares hasta robos con intimidación y lesiones, la banda ha sido vinculada con varios crímenes graves en la provincia. El accionar delictivo de la banda, según las investigaciones del fiscal López Ávila, revela una peligrosa audacia y una falta de escrúpulos que ha dejado a varias víctimas heridas y traumatizadas.

Aunque algunos miembros de la banda están tras las rejas, como Juan José Tagle y Facundo Andrés Farías, otros, como Diego Jeremías Barón Aguirre, aún permanecen prófugos. La detención de Abel Lobo, aunque significativa, no es más que un eslabón en la lucha contra la delincuencia organizada que sigue operando en las sombras de la sociedad. La publicación en Instagram solo destaca la complejidad y las deficiencias del sistema judicial y penitenciario que permiten tales situaciones.

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