Polémica en La Quiaca por cobro de "peajes" en sus calles: Hasta $ 12 mil

Las ordenanzas impositivas de la ciudad fronteriza vuelven a ser noticia por inventar contribuciones que no caen en gracia para los viajeros, pero con la Nº10/2023 el perjuicio podría ser aún mayor, especialmente sobre la actividad turística que tantos beneficios derrama sobre comercios locales.

Fernando Crauzas, propietario de la agencia Hornocal Viajes y Turismo, acompañado de un grupo de turistas con destino final Cuzco (Perú) se convirtieron en las primeras víctimas conocidas de este controversial tributo, tan solo por avanzar más allá del arco de ingreso a La Quiaca.

El fin de semana Crauzas publicó en sus redes sociales un video exponiendo su encuentro con los agentes de Rentas y Tránsito de la mencionada jurisdicción, incluyendo una camioneta, dos motocicletas y al menos ocho personas que rodearon en actitud poco profesional la combi en la que se desplazaban. Un despliegue operativo desproporcionado para detener un vehículo en regla, perteneciente a una agencia registrada en el Ministerio de Turismo de la Nación. 

Antes de llegar al acceso de La Quiaca, la travesía por la Quebrada y Puna jujeña se había desarrollado con total normalidad. Recoger los pasajeros en el aeropuerto, almorzar en Humahuaca y seguir camino hasta un hotel. Solo restaba descansar, hacer el correspondiente transbordo con un colega que llevaría a los turistas cordobeses, rosarios, porteños y brasileños fuera de los límites nacionales al día siguiente. Pero al llegar al arco de acceso a la ciudad, un desinformado agente municipal saldría a su cruce pidiendo el pago de una tasa desconocida.

"El primer encuentro fue en el ingreso al arco de La Quiaca con un chico de Rentas que evidentemente no estaba ni informado, nos quería cobrar $7.500 por ingresar al pueblo. Le contesté que estaba en tránsito, solo iba a parar en la terminal de ustedes porque había pasajeros que deseaban usar el baño y luego ingresar al hotel donde teníamos reserva", relató Crauzas en dialogo con Radio 2. 

El operador turístico falto de efectivo le propuso dejar a los pasajeros y luego arreglar el pago ya que no estaba disponible algún medio electrónico alternativo. Luego vendría la patrulla insistiendo con una multa por negarse a abonar la "Utilización de Vía Pública". Curiosamente dos semanas antes, Crauzas estuvo con otro grupo en la zona y jamás fue advertido de la nueva tasa municipal. 

"Nos generó un descontrol, yo entiendo que si estoy vendiendo algo en la vereda corresponde. Con lo que nos cuesta traer turistas a Jujuy pero sobre todo que pernocten en La Quiaca, porque el 99% de las veces nos dicen que no, nos salen que tenemos que pagar una multa, porque usamos las calles de La Quiaca", relató con indignación el agente, ya que fueron retenidos aproximadamente una hora, generando tal disgusto que los turistas pidieron no alojarse en el hotel con reserva, prefiriendo otra opción del lado boliviano. 

La Quiaca se perdió $30.000 por pasajero, los comerciantes se perdieron la oportunidad de vender, toda la ganancia que el turismo deja al pueblo se esfumó por una tasa sin sentido 

Luego del episodio Crauzas confirmó sus intenciones de hablar con el secretario de Turismo, Diego Valdecantos, para aclarar el propósito de esta herramienta recaudatoria. Incluso insta a los concejales que aprobaron la ordenanza ha entablar dialogo con los agentes locales a fines de entender el "efecto multiplicador que produce el turismo". 

A modo de recordatorio, el año pasado, todavía bajo la administración de Blas Gallardo y por ordenanza impositiva también se cobró un peaje similar pero aplicando montos fijos que iban de $3.000 a $12.000 dependiendo del rodado. Capítulo 2 de la impositiva que atenta contra el turismo esta vez promovida por el intendente Dante Velázquez.